Un viaje a la India sin salir de Chicago
Un viaje a la India sin salir de Chicago. Una experiencia única en el Barrio Indio de West Devon Avenue.
Tal como nos indica la sección de FAMA, Descubriendo Historias todas las grandes ciudades del mundo, además de lugares turísticos, encierran ricas culturas merecedoras de nuestra atención.
En Nueva York Chinatown, el Barrio Chino es una experiencia única. Igual que en Paris, lo es el Quartier LatinBarrio Latino; en Barcelona, Barri Gotic/Barrio Gótico; en Miami, La Pequeña Habana/Little Havana, y en Chicago, uno de mis favoritos, West Devon Avenue/Barrio Indio.
Verán porque este último representa un recuerdo especial e inolvidable, clase aparte de los 15 años que llevo visitándolo y deleitándome en West Devon con maravillas culinarias y modas exóticas, estilos finamente ornamentados que caracteriza la alta costura india.
Esta aventura en particular se trata de una invitación al matrimonio de dos queridísimos amigos y sus familias. La novia, la Capitana Rupal Rawalji, oriunda de Chicago, recién concluyó cuatro años de servicio como Enfermera Pediátrica Calificada (Nurse Practicioner) en las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos.
Sus padres Arunbhai y Ranjanben Rawalji, de la India, soñaban con una ceremonia tradicional para su única hija. Felizmente, el novio Aaron y sus padres John y Jane Deitz, al igual que todos los amigos y familiares norteamericanos, se apuntaron inmediatamente.
Las actividades se llevan a cabo a través de varios días, pero vivir el día de la ceremonia principal es como encontrarse dentro de un filme que combina lo mejor de Bollywood y Hollywood.
El propósito de esta es enlazar a “dos almas, espiritualmente, mentalmente y físicamente” así estableciendo una vinculación afectiva que se extiende a futuras generaciones de las dos familias.
Aquí aparece la corte con los rascacielos de Chicago a la distancia; la fusión de tradición y modernismo
Baarat, la procesión del novio a caballo, guiado por su padre, más bien evoca una comparsa de carnaval con música, panderetas, cantos y baile. Desfilan con él sus familiares y amigos hasta llegar a la “casa” /local de la ceremonia, donde los reciben la madre y familia de la novia.
Ganesh Puja: Señor Dios de Prosperidad y Removedor de Obstáculos. Se le pide bendiciones para un comienzo auspicioso para el matrimonio.
Los nuevos esposos
Bajo el mandap (toldo/altar) se sientan los padres, los novios y el sacerdote hindú. Los participantes se ponen de pie cuando el gesto o ritual lo requiere. Hay más de diez de estos incluyendo prender el Agni Puja – Fuego Sagrado; Jai Mala – intercambio de guirlandas; siete pasos alrededor del fuego; Granthi Bandan, atar el nudo matrimonial, y muchas más.
El que todos hemos visto alguna vez, es la marca roja que la mujer lleva en la frente…es aplicada por su esposo casi al final de la ceremonia y es para decirle al mundo que es una señora casada.
Y como todo esto ocurre en Chicago, los mayores se quedan con atuendo indio y los más jóvenes se cambian a ropa moderna occidental y bailan de todo un poco.