Acompáñame a la Basílica de Nuestra Señora de Lujan

Hoy nos encaminaremos hacia la Capital de la Fe, como los argentinos conocemos a la localidad de Lujan.

Visitaremos la Basílica Nuestra Señora de Lujan, considerada un Santuario nacional con vistas soñadas de la ciudad.

Además de su bonita historia, espiritualidad y arquitectura los recorridos por lugares intrincados es fascinante.

Hoy en día se puede llegar hasta allí en dos horas, viajando en colectivo pero hace 376 años era un viaje largo que se hacía en carreta y duraba muchos días.

Cuando supe que habían visitas turísticas a la Basílica Nuestra Señora de Lujan al estilo de las grandes ciudades europeas, donde los santuarios son tomados como patrimonio turístico más que como patrimonio religioso me organicé y fui.

Tenía la oportunidad de conocer la Basílica por dentro y ver todos los recovecos que están escondidos al visitante común. Fiel a mi estilo. No me lo podía perder.

La Basílica de Luján es una iglesia con estilo neogótico donde lucen sus grandes vitrales traídos de Francia con los escudos de las provincias.

Hay varios recorridos para realizar, yo los hice todos, menos el nocturno. Empezamos por el Mirador 360, el cupo solo admite seis personas. Éramos cinco, más la guía y dos ayudantes.

Hace unos dias se sumaron al Mirador 360 la visita al Descanso del Peregrino, donde se puede ver la cruz que cayó el día 14 de junio del 2000 y el Claustro, que es el patio interno de la Basílica.

Después de dejar atrás la galería Tricornio, subimos por la torre derecha de la Basílica hasta llegar a una puerta que nos permitía ingresar a la galería A Giorno, esta une ambas torres. Desde ahí la vista era soñada.

Ascenso al Mirador 360 por el campanario y observación del funcionamiento del reloj

Romina nuestra guía nos dio cascos y guantes para protegernos las cabezas porque caminaríamos por debajo de unas vigas para poder atravezar el campanario.

” Al abrir la puerta lo único que se veían era una estructura de madera. Tuve que encorvarme, pasar un pie y luego el cuerpo por debajo de una de la vigas. Me enderece y me pegue la cabeza contra la siguiente, lo gracioso fue que nos pasó a los cinco a pesar de que la guía no avisaba: “Cuidado con la cabeza”. Definitivamente los cascos eran necesarios no un adorno”.

Las 20 campanas del campanario, fueron construidas de la fundición de cañones de la Primera Guerra Mundial entre 1918 y 1922.

” Finalmente llegamos detrás de los cuadrantes de ambos relojes de la torre izquierda. Allí también está la máquina que mueve sus agujas. La guía nos contó cómo funcionaba y que íbamos a ver cuándo fueran las 12 del mediodía. De pronto se escuchó la primera campanada y suavemente la maquinaria del reloj empezó a moverse y asi siguió durante las once campanadas siguientes”

El sonido de las campanas es mágico a pesar de estar cerca no aturde

El Mirador 360 está sobre los cuadrantes del reloj

“Estábamos más cerca de esas agujas tan lejanas que apenas se distinguen desde la plaza y desde ahí podíamos descubrir fácilmente la forma de la iglesia que denotaba una cruz perfecta rodeada de torres”.

Antes de seguir nos tomamos un descanso. Nos ofrecieron alfajores artesanales, dulce casero y mermelada acompañado de la infusión que deseáramos.

Torres Premium. Desde acá se tiene una vista impecable del santuario.

En esta visita lo primero que descubrimos fue un órgano principal, su origen es francés (1906) y fue construído exclusivamente para este templo.

El altar mayor y el Camarín de la Virgen

Caminamos por la galería hasta llegar sobre el altar mayor y el Camarín de la Virgen.

Los vitrales que íbamos viendo eran de santos y algunos que representaban a Belgrano entregando una bandera ganada durante la invasiones inglesas a Nuestra Señora de Lujan. 

Desde arriba del Altar Mayor se puede ver el vitral de la roseta que está al frente del templo en la parte exterior.

Desde acá se tiene una vista impecable del santuario. Se puede ver en todo su esplendor.

En el 2030 la virgen va a cumplir 400 años, por su material (barro) se recomienda no tocarla.

Sin embargo para limpiarla y cambiar su manto es necesario hacerlo. Hay que subirse a una escalera para tomarla, de ahí se la pasa a otra persona que está más abajo. Por eso se le está construyendo un ascensor.

El día que estuve la virgen estaba en el altar mayor mucho más cerca de la gente y de lo que va a estar cuando la coloquen en el ascensor.

“José, el guía, con su llavero mágico abrió una puerta de rejas de altura media para ingresar. Caminamos un pequeño tramo por debajo de un pequeño órgano hacia otra puerta que estaba con llave. Esto nos llevó hasta un espacio donde hay un inmenso vitral y una escalera estilo caracol, tan bella como las otras”.

Subimos varias de las escaleras caracol y salimos al apside exterior, donde nos encontramos con bellos arbotantes y debíamos pisar solo sobre las pequeñas vigas que formaban parte del piso. La vista era maravillosa desde allí.

Volvería a visitar la Basílica?

Si una y mil veces. Me pareció maravilloso el lugar, los guías, el acompañamiento y la historia.

La historia de la virgen de Luján, es la historia de una virgen que elige dónde permanecer, y la de un pueblo que crece alrededor de ella hasta convertirse en ciudad y Capital de la Fe.

Según cuentan, todo empezó hace 376 años cuando llegaron dos vírgenes al puerto de Buenos Aires para ser llevadas hacia el norte del país. El camino era largo y duraba meses por recorrerse. A 70 km del puerto tomaron un descanso para pasar la noche al costado del río Lujan.

A la mañana siguiente, una de las carretas no arrancó y pensaron que el buey estaba cansado y que la carga era pesada. Entonces decidieron descargar la carreta. Con la carreta vacía el buey se movía. Fue cuando decidieron ver que había dentro de las pequeñas cajas que estaban cerradas. Eran vírgenes de barro que venían desde Pernambuco, Brasil acompañadas por un esclavo, llamado Manuel. Al colocar una de ellas en la carreta, esta arrancaba; pero al colocar la otra, no se movía. Decidieron dejar la virgen en ese lugar pensando que era allí dónde ella quería estar. Según cuentan, el negro Manuel se quedó cuidándola y nunca se movió de su lado.

Con los años la gente empezó a visitar el lugar para ver a la virgen. El primer santuario era humilde, hecho con restos de lonas y objetos que iban dejando las carretas que pasaban por ahí para que Manuel y la virgen estuvieran protegidos. Luego se construyó la basílica.

Curiosidades:

• Lampara Votiva:
• Esta en el Camarín de la Virgen. La lampara es de plata. Se fundieron los regalos que la gente le dejaba a la virgen y se le sumaron otros materiales para construir esta llamativa lámpara.

• Los nombres en la paredes que se pueden ver en todo el templo: Son los nombres de quienes donaron las piedras para finalizar su construcción. Las rocas fueron traídas de la provincia de Entre Ríos. Se le pidió a la gente que donara esas piedras y a cambio se escribía su nombre en las paredes y se le daba a cada uno un tubo donde se escribía un deseo para que la virgen le cumpliera y se lo colocaba dentro de la piedra.
• Juan Pablo Segundo era conocido como el Papa de la paz, en 1982 cuando estaba visitando Reino Unido comenzó la guerra por la Malvinas, esta guerra fue entre Argentina y Reino Unido. Lo empezaron a llamar de todas formas menos el Papa de la paz ante esto y para demostrar que no estaba a favor de la guerra y menos de alguno de los dos países, decidió venir a Argentina en un día y medio que tenía libre. Hizo su viaje directo a la Basílica de Lujan para entregarle a la virgen la Rosa de Oro, la Rosa de Oro es una distinción que el Papa le dio a Nuestra Señora de Lujan el 11 de junio de 1982 cuando celebro misa en la Basílica.

https://santuariodelujan.org.ar