La historia detrás de la Inmaculada Concepción del Museo del Prado
La Inmaculada Concepción de Los Venerables es una virgen muy humana, pintada por Murillo en 1678. La pintura se encuentra en el Museo del Prado y fue inspirada en la historia de la batalla de Empel.
Desde hacía ya siglo y medio en España estaba tomando cada vez más fuerza una devoción que alcanzaría un vigor extraordinario y que acabaría convirtiéndose en una de las principales señas de identidad colectiva. La historia de la Inmaculada Concepción y el Milagro de Empel se remonta a otros tiempos en España.
Según cuentan las crónicas de la historia, un 7 de diciembre de 1585 durante la Guerra de los Ochenta Años, los Tercios de la infantería española estaban cercados por varios buques enemigos en la isla de Bommel Holanda. ( Flandes, hoy Bélgica pertenecía entonces a la Corona española). Sin defensa, harapientos y hambrientos no se rindieron y subieron al monte de Empel. Tenían pocas posibilidades de sobrevivir la batalla y hasta habían pensado en suicidio colectivo.
Un soldado español se encontró enterrada una tabla con la imágen de la Inmaculada Concepción y la colocó en un altar improvisado. Bobadilla su jefe le pidió a todos orar con un salve. Esa misma noche ocurrió un milagro inexplicable que evito la masacre del ejercito español y les trajo la victoria (las aguas del río Mosa en Holanda se congelaron y las tropas españolas pudieron marchar sobre el hielo atacar a la escuadra holandesa y salir del cerco).
La virgen es proclamada patrona de los Tercios de Flandes y luego de la Infantería española.