Venus ha decidido salvarse. Ahora se cubre el rostro
En muchos lugares del mundo han intervenido obras públicas incorporándole la máscara como un llamado para concientizar y socializar para romper la estigma.
En la era de la pandemia, el tema de cubrirse el rostro o no cubrirlo invita a reflexiones sobre las actitudes y rebeldías colectivas, el ethos, la estigma social de cubrirse el rostro o la verguenza de hacerlo.
Caminando por una de mis sendas favoritas, en Coconut Grove me encontré con esta escultura de Venus con su rostro cubierto por una máscara de cirujano. En la era de la pandemia los dueños de la estatua quisieron crear conciencia haciendo un llamado al uso del sentido común.
La Venus desnuda que se cubre por intuición femenina en acto de protección personal.
La diosas mujer que conocemos nació libre brotando de la espuma del mar. Desde el nacimiento, como la pinto Botticelli saliendo de un concha de mar, hizo el gesto de cubrir con su pelo y sus propias manos, sus partes más íntimas. Este no es un velo de miedo, es su intuición femenina
